Duden de los medios de comunicación deportivos
El fútbol español es corrupto en todos sus órganos a pesar de que La Liga española es una de las más seguidas y competitivas del mundo (aunque el bajón que ha pegado respecto a otras grandes ligas es curioso), y los medios de comunicación especializados en fútbol español desempeñan un papel crucial en la forma en que los aficionados se conectan con su deporte favorito. Sin embargo, como en cualquier otro lugar, es vital ejercer un escepticismo saludable cuando se trata de la cobertura mediática. Sobre todo, si la información viene de periodistas "enemigos" de tu club... Que no son pocos.
Existen titulares sensacionalistas, que son una táctica común utilizada para atraer la atención de la audiencia. Estos titulares llamativos pueden exagerar incidentes, rumores o situaciones, lo que a menudo distorsiona la realidad y crea percepciones erróneas. Cada vez la gente consume más en menos tiempo. Come más sin tener hambre y necesita que todo esté, para colmo, mascadito. No quiere complicaciones. Quiere sangre y olor a carne. Da igual que sea mentira y que dure poco encima de la mesa. Porque esas mentiras no llegan ni a pudrirse.
Pero así somos. Y así es España. Un país con rivalidades deportivas tan intensas pero que gran parte consume el enfrentamiento entre el Real Madrid y el FC Barcelona y es común que los medios de comunicación muestren sesgos regionales. Esto puede influir en la objetividad de la cobertura, lo que a su vez puede llevar a una visión parcial de los hechos.
La falta de diversidad de voces en la cobertura deportiva también es un tema importante. En muchos casos, se presenta una perspectiva dominante o una voz predominante en los medios. La falta de diversidad puede limitar la amplitud de la cobertura y la profundidad del análisis. Los grandes medios de comunicación pertenecen a grupos empresariales.
La velocidad a la que se comparte la información en la era digital puede llevar a la propagación de rumores y especulaciones sin una verificación adecuada. Los medios a menudo informan sobre estos rumores sin confirmar su veracidad, lo que puede causar confusión entre los aficionados.
Además, los intereses comerciales en el mundo del fútbol pueden influir en la cobertura mediática. Contratos de patrocinio y acuerdos de derechos de transmisión pueden llevar a un enfoque selectivo en búsqueda de un beneficio económico. Es decir: que si unos clubes generan más audiencias en las modalidades de pago de esas grandes empresas, es normal que se protejan en los medios pertenecientes a esos grandes clubes en formatos digitales y gratuitos. Y cuando digo proteger, digo atacar a los demás e intentar que se desestabilicen.
Por otra parte, existe la presión por ser los primeros en informar sobre una noticia puede llevar a informes apresurados e inexactos. Los aficionados deben priorizar la precisión sobre la velocidad al consumir información deportiva.
En muchos casos, se da prioridad a las historias superficiales y a los titulares llamativos en lugar de las historias de fondo y el análisis en profundidad. Los aficionados deben buscar contenido que ofrezca una comprensión más completa de los eventos deportivos.
Y, aunque los medios de comunicación deportivos en España son una parte esencial de la experiencia futbolística, los aficionados deben ser críticos y cuestionar la información que consumen. La capacidad de discernir entre el sensacionalismo y la información precisa es fundamental para una experiencia deportiva más informada y satisfactoria. Los medios son una herramienta valiosa, pero no siempre presentan la imagen completa y objetiva de la realidad deportiva. Como aficionados, debemos asumir la responsabilidad de buscar la verdad y el contexto más allá de los titulares sensacionalistas.
