¿Accionista seré hasta la muerte?

Es obvio que cualquier entidad necesita de una estabilidad en la que poder cimentar cualquier objetivo que se tenga. El Sevilla Fútbol Club es una sociedad deportiva y de manera indiscutible la pelota es la que manda en los beneficios que ella dicte; además de un modelo económico en el cual invertir cantidades con no mucho riesgo que puedan dar márgenes de beneficios y dar casi como ingresos ordinarios los ingresos extraordinarios. Pero siempre con una unión dentro de los accionistas, como hubo en todo este siglo XXI que nos ha llevado a lo que somos. Porque antes tenemos un ejemplo de crisis institucional: lo vivimos en los años 90 y ya sabemos cómo terminó todo aquello: dos descensos y 3 temporadas en segunda división en 4 años. Además de todo esto, hay que asumir que nadie nos regala nada porque, seamos sinceros, tampoco es que caigamos bien al resto de la cultura futbolística nacional. Muchos han esperado y siguen esperando que soltemos el pie de ese acelerador que casi ni nos pertenecía para pisarnos el cuello y adelantarnos; e incluso, a poder ser, mofarse de nosotros. Aunque no he venido a hablar de eso: se les saca el comodín de los títulos y ahí encontramos nuestro lugar feliz.

El Sevilla probablemente tanto como cualquier otro club -pero más si cabe- necesita de la unión de sus directivos y su afición. Es casualidad que coincidan malos resultados deportivos con malas relaciones entre accionistas. Y para muestra un botón. Porque, sí, pienso que si el ex presidente Del Nido en las temporadas que correspondían entre 2011 y 2013 estaba más pendiente de defenderse de la justicia y el equipo lo notó. Habría que recordar que veníamos de meternos en Champions y ganar la Copa del Rey en 2010 y que la única temporada en la que no nos clasificamos a Europa desde 2004 fue con él en la 2011/2012. También pienso que desde que el ex presidente Del Nido irrumpió como un elefante en una cacharrería el club ha pegado un bajón muy importante. Ya que fue la primera junta de accionistas sonada aquella de diciembre de 2021, con las mascarillas. Y ya sabemos los números en 2022... 

Por supuesto que la gestión de Pepe Castro no ha sido buena en los últimos dos o tres años, y no hubiera estado mal que presentara su dimisión. Pero... ¡ay, el dinero y el poder! Tampoco ayuda que varios de los fichajes nos salieran rana, no se vendiera cuando se tuvo que vender, nos equivocáramos en el concepto de "ambición" y para colmo, por suceder, casi nos sucedió de todo en entre el año 2022 y 2023: tres entrenadores, puestos de descenso, ninguneo del Ajax con Ocampos, positivo de Papu Gómez, pelea de Monchi con Isco, deuda... Ganar la UEFA Europa League ha sido un milagro a la altura de la aparición de la Virgen de los Reyes a Fernando III (antecesor de nuestro actual jugador Fernando Reges). Aquello fue impresionante, no por imposible sino por improbable. Que ya sabemos todos del mérito que tiene ganar a quienes ganamos y ese título se levantó desde la grada. 

El sevillismo de a pie, que estamos pensando en pagar nuestros alquileres o nuestras hipotecas como objetivo prioritario mensual y no se nos pasa por la cabeza invertir 5.000, 20.000 ó 50.000 euros para comprar acciones del equipo que lleva nuestro corazón por escudo, nos sentimos muy indefensos ante este grupo de privilegiados que sí pudieron y siguen pudiendo invertir cantidades millonarias. De nueve cifras dice que fue la oferta que le hicieron y se jacta el señor Benavente (Lopera dixit). ¡Mínimo 100.000.000! ¿Habéis calculado cuánto dinero vais a ganar a lo largo de toda vuestra vida? Lo idílico sería que todos esos ricos se pusieran de acuerdo. Pero no será así. En 2013 el ex presidente Del Nido dijo en su despedida: «La paz social desde el punto de vista accionarial es necesaria para que el Sevilla camine con paso firme y siga creciendo». «De puertas para afuera, apoyo sin fisuras al que sea nuevo presidente, para que no existan flecos por los que se pueda atacar. Todo ello en beneficio del Sevilla FC». Todo parece hoy distinto. Al final, el cambio en la presidencia va a beneficiar al Sevilla FC, que necesita un cambio.

Muchos apenas recuerdan las pérdidas en las temporadas 2012 y 2013 (no las voy a comparar, porque son mucho menores, aunque también el presupuesto era mucho menor). Toda gestión del ex presidente Del Nido no fue impecable: hubo enfrentamientos con Biris Norte por unas medidas excesivamente restrictivas y un trato desigual con otras zonas del estadio y el daño institucional y de imagen que causó su entrada en prisión, que él mismo reconoció y pidió perdón, por cierto. Que nadie diga que no afectó porque esto lo reconoció él mismo. No nos ha ido mal sin él, en general. Pero la ruina actual, insisto, debería haber acabado con la presidencia de Castro hace tiempo. Si se recuerda aquel Sevilla campeón que rompió todas las barreras en 2006, 2007 y 2010, lo justo sería que se recuerde al Sevilla de 2014, 2015, 2016, 2020 y 2023. Porque, por cierto, lo de la inercia no se lo compro. Un año o dos, vale. Pero diez, no. Algún mérito habrán tenido los responsables del Sevilla post ex presidente Del Nido. Porque entonces, de la inercia de D. Roberto Alés se beneficiaría el abogado de las minutas y la cárcel (la de Gol Norte en 2012). Méritos tienen todos. Deméritos, también.

La entrada de otros empresarios sevillistas me parece buena y que formen parte del club, aunque no deja de ser un trato por las ayudas prestadas a Del Nido Benavente durante estos años atrás para volver al poder. José Castro se irá en breve con una deuda importante y se viene revolución importante. Máximo de aquí a un año. Pero la duda que se me viene va más allá. Han salido documentos en los que tanto Pepe Castro como Del Nido Benavente habrían vendido acciones a 777  Partners, donde ya poseen entre un 7 y un 15% del Sevilla FC. Dudo mucho que no aumenten esos números y, viendo lo sucedido en otros clubes, mi único deseo es que nunca se pierda el control del club por parte de sevillistas. El problema es que no me fío de nadie.

Entradas populares de este blog

Sevilla de clase alta. Betis de trabajadores.

Entrevista a Nacho Mateos (2023)

El escudo del Sevilla FC

Entrevista a Jose María Aguilar (Fabrizio)

Los abonados de la #AltaNorte